Es un hotel lindo, instalaciones bonitas, frente a la playa, aunque faltaron reposteras en playa, ya que habían instalaciones de quitasol. Caminando por la playa estás a 20 minutos del pueblo, como para ir a almorzar. No me gustó que la habitaciones no contaran con frigobar, al menos la habitación que yo compré era la delux, y la falta de frigobar fue un punto bajo, considerando las temperaturas. Tampoco había agua de cortesía, habitual en los otros hoteles de mi estadía en Órganos.
Bonito lugar, pero le faltan detalles importantes.